domingo, 20 de diciembre de 2015

Respuesta Ausente


Esperas impaciente por esa palabra, esa frase, esa oración que redireccione tu sentir y no sabes si seguir esperando es la solución o si debes empezar a actuar. Pero lo cierto es que no depende de ti. 

Haces depender tu alegría de alguien externo a ti y te asusta el poder que tiene en ti esa persona, esa de la que esperas una respuesta que aun no recibes y que probablemente no quieras escuchar, pero que te mueres por saber.  La ansiedad te hace prisionero y te mantiene atado a la expectativa de esa respuesta ausente que tal vez has recibido implícitamente y que te niegas a aceptar.

I. Paredes :)


Mayo 2013

Reflejos de Hipocresía


Buscando un lugar donde no abunden los hipócritas vine a parar a este lugar, este cuarto oscuro y sin espejos; para ni siquiera ver mi reflejo, tan falso y mentiroso como los demás.

Sí, porque hasta yo soy espejo de esos falsos que deambulan por cada rincón y en todas las esquinas. No sé si yo los reflejo a ellos o en ellos me reflejo yo, pero he descubierto que por momentos sufro del mismo mal; por una razón u otra (no herir, dar ánimos, regalar una sonrisa o salirme con la mía)  son momentos en que me desvisto de mí y me convierto en el reflejo de lo que creo debo ser en ese momento, aun cuando esto no esté unido a mi sentimientos, ideas o pensamientos. 

Repudio a los hipócritas porque odio la hipocresía y creo que tal vez me odio a mí misma, cada vez que soy pérfida a mi persona... odio lo que odio, pero sobre todo odio cuando me convierto en lo que odio, porque soy igual de detestable que esos a quienes tanto odio.

No sé si deba dejar de odiar o si lo que debo hacer es dejar de reflejar eso que tanto detesto de los demás. Sea cual sea la solución, la cura será mejor que esta insoportable enfermedad.

I Paredes

Mayo del 2013